VIDEO-CASO

RELATO ALBERTO

El caso que se ha escogido y vamos a relatar tuvo lugar en un Colegio alavés, mientras se cursaba el Practicum I.  El centro posee la identidad de público y se encuentra ubicado en la zona de Gazalbide, concretamente en el barrio de Txagorritxu. Este se encuentra distribuido en dos edificios; por un lado, el correspondiente a la Educación infantil y por otro, un edificio destinado únicamente para la Educación Primaria.

    La escuela, cuenta con 368 estudiantes en Primaria, y cada curso posee tres líneas. Una de las características que lo definen es su gran variedad cultural dentro de sus aulas; Marruecos, Sahara, Ucrania y/o Colombia son solo uno de los ejemplos que demuestran la gran diversidad cultural que podemos encontrar dentro de esta institución educativa.

    En cuanto al nivel socio-económico que posee el alumnado de este centro escolar, podríamos decir que en términos generales, pertenecen a familias de origen socioeconómico bajo, debido principalmente a la carencia de recursos que estos poseen, al ser como hemos comentado con anterioridad, de origen extranjero. No obstante, también podemos encontrarnos con alumnos/as con un nivel socio-económico medio, medio-alto, aunque no resulte muy frecuente.

    En cuanto a la organización del centro, hemos generado una tabla para poder observar a simple vista su organización:

    En cuanto a la metodología, en este sentido, con un simple vistazo al aula ya podemos ver cómo el aula se distribuye en pequeños grupos de entre cuatro y cinco personas.  El tipo de metodología por el que apuesta este centro en su proceso de enseñanza-aprendizaje, resulta muy diferente a otras realidades que existen dentro del ámbito educativo.

    Lo que pretendemos explicar con la afirmación anterior es el hecho de que en la mayoría de los casos, estamos acostumbrados y tenemos interiorizado el modelo de aula en el que el alumnado está distribuido en pupitres de manera individual o en su lugar, en parejas.

    En cuanto a lo académico se refiere, y las estadísticas realizadas por el propio centro, la metodología influye de una forma directa al alumnado. Este tipo de metodología fomenta el trabajo colaborativo y grupal, ya que distribuyendose en pequeños grupos, es una buena oportunidad para que puedan relacionarse con sus compañeros, cooperando, riendo, jugando, aprendiendo.

    El colegio trabaja con la editorial SM, que dispone de un amplio material vía online. Por eso el docente que sabe trabajar con las nuevas tecnologías tendrá más facilidades.

    Tras haber situado el contexto del centro escolar, se procede a narrar el relato. Para proteger a los protagonistas que aparecen en el relato, hemos cambiado sus nombres, respetando de esta forma su correspondiente anonimato.

    Esto sucedió el primer día de entrada al colegio, concretamente a la hora del patio. Según los docentes, esta resulta ser la hora más conflictiva a lo largo de toda la jornada escolar. El fútbol es el deporte que más alumnado practica y en general, solamente juegan los chicos. Alberto pertenece a la clase de 5b (alumnos/as cuya edad ronda los 10-11 años) y suelen jugar partido contra los de cuarto curso. Como ya hemos comentado con anterioridad, el alumnado del centro es diverso culturalmente hablando. Así pues, en cuanto a las características de los protagonistas de este suceso, podríamos mencionar el hecho de que se encontraban alumnos de diversas nacionalidades jugando juntos un partido de fútbol.

    Ese día Alberto estaba jugando cuando de repente se cayó al suelo. Este agarró (queriendo o sin querer) la pierna de un compañero suyo y éste también tropezó y cayó. Al instante, todos los jugadores del equipo rival comenzaron a propinarle una serie de patadas y manotazos en todo el cuerpo. Como es lógico a estas edades sus compañeros salieron en defensa de Alberto. Algunos de estos lo protegían, mientras dos de ellos fueron a avisar al tutor responsable del patio.

    La tutora de Alberto, reunió a todos los integrantes de la pelea y todos aquellos que tenían información al respecto. Reunió a los agredidos, agresores y personas que lo habían presenciado, les repartió un folio blanco en la biblioteca donde nos encontrábamos solos.  Empezó a recitar unas preguntas retóricas, las cuales estos tenían que pensar y plasmar en dicho folio. La mayoría estaban destinadas a qué había sucedido en el recreo, pero dictó cuatro últimas acerca del agredido y agresores:

-  ¿Cómo se siente ahora mismo Alberto?¿Cómo os sentís ahora mismo vosotros(agresores)? ¿Qué pensarán los padres de Alberto?...

    Idoia no obtuvo ningún tipo de respuesta por parte de los alumnos allí presentes en la biblioteca. Además, cabe destacar el hecho de que Alberto se encontraba en una esquina aislado, tratándose de esconder.  Nada más acabar esta pregunta, un niño se derrumbó, se levanto y abrazo a Alberto.

    La solución no eran innumerables castigos, sino que la única solución era empatizar con la persona, era aprender a asumir errores y saber perdonar al compañero. Idoia había estado intentando poner solución al bullying que le hacían sus compañeros a Alberto, durante el año pasado probó infinidad de fórmulas para que estos acontecimientos no se repitieran y siempre caían en vano.

    Por eso, tanto ella como la PTE pusieron ese castigo a los alumnos que habían estado en la pelea. La situación de cebarse con Alberto debía cesar y sus compañeros tendrían que aprender que Alberto es alguien especial y que no podemos tomarnos sus actos como los de otra persona, ya que no los controla.

    Cabe destacar que Alberto es un niño con innumerables problemas. El autismo quizá sea el más leve en él. En clase le cuesta mucho hacer amistades porque siempre está “chinchando” a los demás compañeros –según sus profesores pero su tutora Idoia, sabe de buena mano que eso es la excusa fácil. Alberto es muy nervioso debido a la enfermedad y muchos de sus movimientos no los controla. Cuando cayó al suelo, claramente el acto de agarrar a su compañero por la pierna fue involuntario. Pero el resto de los niños lo vieron como una zancadilla.

    Además, cuando comenzó quinto curso, su madre (ya que es una familia de padres separados) optó por darle la medicación recetada por el médico especialista que modifica de forma muy brusca sus conductas. Alberto, ha pasado de ser un niño nervioso e intranquilo y que da problemas, a todo lo contrario; pasar desapercibido. En clase es ayudado por una PTE que trabaja en clase con él de forma inclusiva. Después de la medicación, la PTE ni se molesta por Alberto ya que no genera ningún problema a la clase.

    Se ha estado trabajando con la tutora de Alberto y durante las prácticas se ha ido observando cómo se han conseguido grandes avances con el alumno. Uno de ellos fue introducirlo en un grupo de trabajo de clase. Antes, formaba parte de él pero como alumno pasivo. Hoy en día, es capaz de opinar sobre un tema sin ponerse nervioso y querer imponer siempre su opinión por encima de la del resto. Además, también se advirtió una clara mejoría tanto en caligrafía como en ortografía. Alberto comenzaba a traer sus deberes hechos a clase, algo que hasta ese momento resultaba algo imposible de conseguir que hiciese.

    A través de este relato se ha intentado plasmar el caso de Alberto, uno de tantos casos de agresión que se dan día a día en todas las escuelas. Así pues, está en nuestra mano, la nueva generación de docentes, impulsar cambios verdaderamente significativos para el alumnado y que les sirva para crecer no solo como alumnos sino como personas.